En una victoria electoral decisiva, Javier Milei ha sido elegido presidente de Argentina, superando a Sergio Massa en un resultado que ha sacudido el panorama político del país y marcado el inicio de una nueva era política y económica.
El candidato de la Libertad Avanza, Javier Milei, ha logrado un contundente triunfo en las elecciones presidenciales argentinas, derrotando a Sergio Massa en un balotaje que ha sorprendido a la nación. Los resultados oficiales confirmaron un apoyo significativo a Milei en el interior del país, particularmente en las provincias de Mendoza y Córdoba, lo que fue determinante para su victoria.
Sergio Massa, reconociendo su derrota, felicitó a Milei y destacó la elección de un nuevo camino por parte de los argentinos. La provincia de Buenos Aires, un bastión crucial, no proporcionó a Massa la ventaja esperada, mientras que la eficiente estrategia de fiscalización de Libertad Avanza aseguró una victoria transparente en el distrito.
Mauricio Macri, ex Presidente de Argentina, jugó un papel clave en el éxito de Milei, ayudando a formar una alianza vencedora conocida como el Pacto de Acassuso. Esta alianza dio lugar a una victoria resonante en varias provincias clave, incluyendo Tucumán, Neuquén, Chubut, Salta, Santa Fe y Corrientes.
Con su asunción el 10 de diciembre, Milei se convertirá en el décimo presidente democrático de Argentina, enfrentando la tarea de liderar una transición política y económica en un contexto delicado. Se espera que las próximas semanas revelen más detalles sobre su equipo de gobierno y las políticas que adoptará.
Massa, actual ministro de Economía, se enfrenta a la decisión de si liderará el traspaso de poder o delegará esa responsabilidad. Argentina, que Milei heredará, enfrenta desafíos críticos, incluyendo una inflación anual del 142,7%, una pobreza superior al 40%, y una economía aún recuperándose de los impactos de la pandemia.
Milei también deberá navegar un Congreso fragmentado, donde sus bloques minoritarios deberán buscar consensos para avanzar en las reformas prometidas. Entre los desafíos más significativos se encuentra su propuesta de dolarización, que enfrenta varias preguntas complejas sobre su viabilidad y aceptación tanto a nivel nacional como internacional.